Este martes, el grupo parlamentario VOX, en colaboración con el PP, ha presentado en las Cortes de Castilla y León una Proposición de Ley de Concordia de Castilla y León. Esta propuesta tiene como objetivo la derogación del decreto de memoria histórica y busca «defender la dignidad de las víctimas desde el año 1931 hasta 1978». Este período histórico ha sido testigo de profundas transformaciones políticas, sociales y culturales que han dejado una huella indeleble en la historia y la identidad de España. La propuesta busca reconocer a quienes sufrieron persecución o violencia por motivos ideológicos, religiosos y sociales durante ese tiempo.
En un comunicado conjunto, ambos partidos destacan que el acuerdo de Gobierno subrayaba la importancia de «reivindicar nuestra historia común como un elemento integrador para la reconciliación, rechazando cualquier intento de usarla para dividir a los españoles». La exposición de motivos de la ley señala: «Solo una actitud decidida y generosa hacia la reconciliación puede contribuir a sanar heridas y restaurar el equilibrio perdido en la comunidad».
«El registro de esta Proposición de Ley cumple con este tercer pilar del pacto de Gobierno», añaden. «El texto normativo se fundamenta en el respeto a la dignidad humana y promueve la convivencia, valorando el Estado constitucional y excluyendo la confrontación partidista», continúa el comunicado.
Desde VOX, han subrayado que la iniciativa «pone fin al sectarismo de la izquierda» al ofrecer «un trato igualitario a todas las víctimas de violencia por motivos ideológicos, religiosos y sociales» entre 1931 y 1978. También han afirmado que el registro de esta Proposición de Ley «continúa cumpliendo con el pacto de Gobierno suscrito entre ambas formaciones durante la tramitación de sus segundos presupuestos autonómicos».