Cada año que pasa nacen menos niños en España. En solo una década el número de bebés ha caído un 24% y en veinte años un 28. Una de las razones detrás de este fenómeno es que cada vez se posterga más la maternidad. España es de los países europeos con menor tasa de fecundidad, solo por delante de Malta. Francia, la República Checa y Rumanía, por el contrario, tienen los índices más altos de natalidad del continente. Las madres españolas son, además, las más envejecidas. Nuestro país es en el que más mujeres esperan hasta los 40 o más adelante para dar a luz de toda Europa. Letonia, Alemania y Suecia representan el menor porcentaje.
