Un joven de 18 años, procedente de Gambia, portaba un cuchillo de grandes dimensiones e intentó robar a uno de los conductores del transporte público. Ante el intento de robo con violencia, la policía fue avisada. Al llegar al lugar de los hechos, el agresor se abalanzó sobre los agentes con el arma blanca en un claro intento de atacarlos. Uno de los policías cayó al suelo, y según ha confirmado la Jefatura Superior de Canarias, se vieron obligados a repeler el ataque mediante el uso reglamentario de sus armas de fuego. Recibió cinco disparos y uno de ellos fue en el cuello
