Polémico informe del Telegraph que revela cómo algunos ayuntamientos del Reino Unido están destinando grandes sumas de dinero público a inmigrantes ilegales y solicitantes de asilo. Se mencionan casos donde se han gastado millones de libras en servicios como clases de yoga, habilidades de DJ y hasta la compra de PlayStations, todo financiado por los contribuyentes. ¿Es justo que se utilicen estos recursos para este tipo de ayudas?
