El pasado viernes, Begoña Gómez, esposa del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, compareció por segunda vez ante un juez como investigada. Junto a ella, también fueron investigados José María Cello de Portugal, actual vicerrector de relaciones institucionales de la Universidad Complutense de Madrid, y su antecesor, Juan Carlos Do Adrio. Ambos vicerrectores señalaron que no existía ningún expediente que justificara la creación de la cátedra para Gómez, afirmando que fue una orden del rector Joaquín Goyache, con pruebas de llamadas y mensajes de WhatsApp. Además, se reveló que Gómez frecuentaba la universidad con María, su secretaria personal y asesora del Gobierno. La situación judicial de Gómez podría complicarse por la posible apropiación de recursos públicos, mientras el Partido Socialista empieza a distanciarse de Sánchez. Gómez se acogió a su derecho a no declarar, y queda por ver cuál será el próximo paso del juez Peinado en este caso sin precedentes en la democracia española.
