Hoy en Dando Caña, en crónicas de manicomio, vemos el caso de una persona que llevo a los tribunales a su ex pareja por un anillo de 70.000 dólares.
¿Quién se queda con el anillo de compromiso si se cancela una boda? En esta historia real de Massachusetts, un hombre gastó 70,000 dólares en un anillo para su prometida, pero tras descubrir una infidelidad, decidió cancelar la boda y reclamar el costoso anillo. Inicialmente, el tribunal de primera instancia falló a favor de ella, argumentando que el anillo era un regalo. Sin embargo, el Tribunal Supremo de Massachusetts estableció que el anillo es un «regalo condicionado» al matrimonio y, al cancelarse la boda, debía devolverse.
Esta decisión marca un precedente en la legislación estadounidense sobre regalos de compromiso y responsabilidades legales en rupturas amorosas. ¿Qué opinas? ¿Debería el anillo quedarse con quien lo recibió o volver a quien lo regaló?