Antes de llegar a la semana del apagón, del que no sabemos quién fue responsable, ayer apareció una segunda crisis ferroviaria por robo de cobre de las líneas del Ave Madrid-Andalucía. El caos informativo a los usuarios ha sido el mismo. Nadie pide perdón, si acaso se adelanta -sin pruebas- la hipótesis de un sabotaje organizado, según dice el ministro Óscar Puente. La desinformación es una característica de la Administración Sánchez y sus ministros son desinformadores natos. Tenemos pruebas a porrillo: con la luz, con el tren, con el Parador de Teruel, con el hermanísimo músico o con la parienta académica tuneada con un montón de cosas.
