Tensa sesión de control marcada por los casos de corrupción que acorralan al Gobierno de Pedro Sánchez, quien no contó con el respaldo de Sumar, que decidió plantarle. Feijóo pidió su dimisión y lamentó que no puede sacar adelante la moción de censura por falta de cuatro votos. La crispación en el hemiciclo fue en aumento, con la salida del líder de VOX, Santiago Abascal, tras sus duras acusaciones, y un tenso cara a cara entre Sánchez y Rufián.
