Arranca en Dubai la cumbre del clima conocida como COP 28 y la llegada de los delegados de los países es lo que más ha acaparado la atención. Hoy ha sido muy criticado Carlos III, quien ha llegado a Dubai en avión privado. Algo que también ha hecho el primer ministro, Rishi Sunak o incluso Bill Gates. Pero no han sido los únicos. Quién no puede bajarse del Falcon es Pedro Sánchez y en ésta cumbre no iba a ser menos. El presidente llegó ayer por la tarde a Dubai y para ello, movilizó un Airbus A310, el Falcon y un helicóptero Super Puma. Éste, por cierto, es el segundo viaje de Sánchez a Oriente Medio en menos de una semana. Sin embargo, esta mañana, con la cabeza bien alta, Sánchez, ha apelado a los actores públicos y privados para mitigar los efectos del cambio climático. Olvidando, parece ser, que él mismo contribuye a ello. Por lo tanto, resulta paradójico que los líderes pidan en esta cumbre más medidas para luchar contra las consecuencias del cambio climático.
