No es orgullo, es pura soberbia. Sánchez pudo comprobar la semana pasada que ni PP, ni Vox ni Junts le pasan por alto que su decreto ómnibus mezclase pensiones con desahucios, palacetes o ayudas por la DANA. Las posiciones son irreconciliables el Gobierno ha entrado en un vamos a ver quien se baja antes del burro, en lugar de atender al interés general. Tres días después las posiciones no han variado ni un milímetro. Los de Sánchez que no a trocear y la oposición que nones. Y aquí parecen dos preguntas:¿Tiene sentido volver a presentar las 140 páginas del decreto Ómnibus sin trocearlo? ¿Se arriesgará Sánchez a defraudar -propaganda aparte- a 12 millones de pensionistas con su todo o nada con los decretos?
