El Gobierno entre tanto defiende su ley y apunta al doble rasero del PP por cargar en el pasado contra la acusación popular. Esta figura, atípica en el derecho europeo, ha sido usada y criticada a partes iguales por los partidos y tanto PP como PSOE han tratado de eliminarla. El PSOE se ha personado en decenas de casos que han afectado a dirigentes populares: los mas conocidas, Gurtel, Punica, Lezo, Kitchen y en la comunidad valenciana las causas contra Francisco Camps o Rita Barberá. Hoy ejerce la acción popular en el caso del novio de Ayuso o en las mascarillas de Madrid. El PP por su parte se ha personado en los ERE de Andalucía y en el caso del Tito Berni. Podemos ejerce hoy la acusación popular en el caso Pujol.
