El presidente se ha reunido por primera vez tras la riada con las víctimas de la DANA. Y su llegada, a pesar del gran despliegue policial, no ha estado exenta de tensión. Pitidos, abucheos y gritos de ‘fuera’ o de ‘Sánchez dimisión’ han evidenciado el malestar del pueblo valenciano. Del encuentro del presidente con las principales asociaciones de víctimas, ha salido el compromiso de celebrar un funeral de Estado cuando se cumpla un año de la catástrofe y la puesta en marcha de obras hidráulicas que eviten inundaciones.
