Tal día como hoy, 30 de diciembre de 1870, moría en Madrid el general Juan Prim, a consecuencia de las heridas sufridas en un atentado varios días atrás.
Prim, catalán de Reus, había sido uno de los personajes más notables del siglo XIX. Empezó en el ejército como soldado auxiliar en las milicias contra los carlistas y a los 26 años ya era coronel con dos laureadas. Héroe de guerra en las carlistadas, primero, y en Marruecos después, estuvo implicado en todas las conspiraciones del bando progresista bajo la monarquía de Isabel II, con Espartero en el Gobierno. Inicialmente aliado de Espartero, terminó apartándose de él por su política hacia Barcelona y pasó al bando de los que, desde Francia, conspiraban para el retorno de la regente María Cristina. Participó en el golpe contra Espartero y fue recompensado con los títulos de conde Reus y vizconde del Bruch. No hubo jaleo político –y fueron millón- en el que no anduviera metido, con varios episodios de destierro y, acto seguido, reconciliación y ascenso. No por ello dejó de gozar de la protección de la reina… hasta que conspiró también contra la reina.
En efecto, Prim fue protagonista fundamental de la Revolución de 1868, que tuvo mucho de golpe militar. Ministro en el primer Gobierno revolucionario, jefe del ejecutivo después, su objetivo era implantar en España una monarquía de nuevo cuño, bajo una dinastía distinta a los Borbones, que adoptara el modelo de la monarquía constitucional. Suya fue la idea de ofrecer la corona de España a Amadeo de Saboya, que aceptó. Era 1870. En aquel momento, Prim, con 56 años, era el hombre más poderoso de España: jefe del Gobierno, ministro de la Guerra y jefe de los ejércitos. El 27 de diciembre, Prim se disponía a trasladarse a Cartagena para recibir a Amadeo de Saboya, el nuevo rey. Al salir de palacio, un grupo de republicanos atacó el carruaje del general con disparos de trabuco. Prim resultaba gravemente herido.
El general fue trasladado a palacio. Tenía una mano destrozada y en el hombro izquierdo siete balas de trabuco. Sus heridas se infectaron. Prim moriría tres días después. ¿Quién disparó? El republicano Paul y Angulo, según parece acreditado. ¿Quién dio la orden de matar a Prim? Pudo ser cualquiera: Serrano, Montpensier… su gente apareció relacionada con los que dispararon. Pero no se sabe: el asesinato de Prim es uno de los grandes crímenes sin resolver de la Historia de España.
Otros hechos:
1850: El conservador Juan Donoso Cortés pronuncia un resonante discurso en el que denuncia la corrupción administrativa y provoca la dimisión de Narváez.
1879: Atentado republicano en Madrid contra los reyes Alfonso XII y María Cristina; la reina resultó levemente herida.
1895: Nace en Madrid el escritor José Bergamín, comunista, delator durante la guerra civil, que acabó apoyando al entorno de la banda terrorista ETA.
1930: El general Berenguer anuncia elecciones municipales para el 19 de marzo de 1931.