La Guardia Civil está llevando a cabo una investigación sobre los daños causados al vehículo de la viuda de David Pérez, uno de los dos guardias civiles que fueron asesinados en Barbate tras ser arrollados por una narcolancha. El incidente tuvo lugar en valle de Egüés (Navarra), donde reside la familia. Fuentes de la Benemérita han informado a EFE sobre el ataque ocurrido en la madrugada del miércoles en un aparcamiento. Actualmente, las causas del ataque al vehículo, único afectado en el estacionamiento, no han sido determinadas.
David Pérez, de 43 años de edad, era miembro del Grupo de Acción Rápida (GAR), estaba casado y tenía dos hijos. A pesar de haber nacido en Barcelona, había pasado más de una década, desde 2011, desempeñando su labor en Navarra, donde también había establecido su hogar. Los GAR se dedican a operaciones contra el narcotráfico o el terrorismo, y tienen su base en Logroño (La Rioja), aunque también están presentes en la Comunidad Foral.