Pedro Sánchez ya sabe qué hacer con Ábalos
Lo primero que necesita Pedro Sánchez es tapar el agujero negro de José Luis Ábalos.
José Luis Ábalos es el hombre que todo lo sabe, desde la financiación de la campaña que llevó a Pedro Sánchez a recuperar la secretaría general de su partido, hasta las maletas de Delcy Rodríguez, pasando por el enorme negocio de las mascarillas y los contratos fraguados durante el estado de alarma a costa de la pandemia. Todo eso, más los secretos de Pegasus, lo sabe, al parecer, este hombre que ya ha quedado maldito, el enemigo del pueblo, el ex Ministro de Fomento y ex Secretario de Organización del PSOE que encumbró y sostuvo al presidente, que hoy necesita terminar con él. O quizás no tanto.
El PSOE le ha exigido formalmente a Ábalos que abandone su escaño. Este ha respondido presentando su dimisión como presidente de la Comisión de Interior en el Congreso de los Diputados pero no ha entregado su acta de diputado, porque eso sería tanto como perder el aforamiento en el Tribunal Supremo y quedar al albur de la Audiencia Nacional, que instruye la causa contra Koldo García y tardaría –probablemente- muy poco en llamar a declarar al ex ministro en la causa.
Si Ábalos no deja el escaño el perjuicio para el PSOE es indudable, pero si Ábalos tira de la manta el daño sería posiblemente mucho mayor. ¿Qué pueden hacer?
Es plausible que tanto a Ábalos como al PSOE solo les quede una salida, un paco inconfeso: que pese al tira y afloja ente las partes el diputado se niegue a renunciar al escaño y el partido le envíe al grupo mixto, de tal manera que, por una lado, el PSOE quedaría bien ante la opinión publica, por otro lado Ábalos seguiría manteniendo el aforamiento, en tercer lugar se evitaría su imputación por la Audiencia Nacional y por último el ex hombre fuerte de Sánchez no tiraría de la manta.
Es lo que veremos en los próximos días: un poco de circo, y balón hacia delante.
Cualquiera de las otras opciones amenaza sin piedad el castillo de naipes del Frente Popular.