El Gobierno de PSOE y Sumar ha decidido finalmente rescindir unilateralmente el contrato materializado por el Ministerio de Interior, de Fernando Grande-Marlaska, para adquirir munición de Israel. Este cambio repentino es resultado de las presiones de los socios de Gobierno de Pedro Sánchez, que auguraban una crisis institucional si los socialistas no se echaban atrás.
La adquisición de España consiste en 15,3 millones de balas a esta empresa israelí por un importe de 6,6 millones de euros. La formalización de este contrato causó una gran indignación en la izquierda a la izquierda del PSOE, empezando por Sumar, el cual exigió su cancelación inmediata.
En concreto, la junta de inversión de material de doble uso denegará el permiso de importación de este material a España, por parte de la compañía israelí IMI Systems. Fuentes del Gobierno alegan un «interés general» en esta decisión, e indican que el Ministerio de Interior abandonará el acuerdo de forma unilateral.
Prever el próximo movimiento de la empresa israelí
Además, las mismas fuentes indican que la Abogacía del Estado y los ministerios implicados ya están estudiando posibles reacciones legales y reclamaciones por parte de la compañía afectada.
Ambos partidos del Gobierno afirman que están «firmemente comprometidos con la causa palestina», así como con la paz en Oriente Próximo. Así, contradiciendo a uno de sus ministros, el Gobierno ha reiterado que desde el 7 de octubre de 2023, España «ni compra ni vende armamento a las empresas de Israel», ni tampoco «lo hará en el futuro».
Continuando con su justificación, el Gobierno de Pedro Sánchez expone que los procesos de compra que siguen abiertos se iniciaron antes de dicha fecha y aseguran que los relativos a armamento «no se van a ejecutar».
Una bronca y la negación de una «crisis de Gobierno»
Volviendo a las mismas fuentes, estas aseguran que se llegó al punto de agotar todas las vías de negociación. Por ello la Presidencia del Gobierno, la Vicepresidencia Segunda y los ministerios competentes han decidido revertir dicho contrato.
Yolanda Díaz, Vicepresidenta Segunda y lideresa de Sumar, ya dejaba entrever por la mañana, en unas declaraciones públicas en Toledo previas al anuncio oficial, que finalmente se materializaría la anulación del polémico contrato. Así, mientras participaba en un congreso de CCOO, confirmó que mantenía desde ayer conversaciones con el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y el titular de Interior, Fernando Grande Marlaska. Díaz elevaba así las presiones para que su exigencia saliese adelante.