El juez de la Audiencia Nacional, Santiago Pedraz, ha optado por revocar la orden de bloqueo de la aplicación de mensajería instantánea Telegram, que él mismo había autorizado anteriormente. Argumenta que dicha medida sería «excesiva y desproporcionada», reconociendo el claro perjuicio que causaría a los millones de usuarios que la utilizan.
En un auto recogido por Europa Press, el titular del Juzgado Central de Instrucción Número 5 enfatiza que el bloqueo tendría un impacto económico significativo para las empresas o entidades que dependen en gran medida de esta plataforma de comunicación, considerándola un canal fiable y seguro contra intromisiones no deseadas.
Según Pedraz, aunque es conocido que Telegram se emplea también para actividades delictivas, la cantidad de usuarios de todo tipo que la utilizan es considerable, ya que ofrece beneficios que otras plataformas no proporcionan, todo bajo la premisa de una supuesta privacidad.
El auto señala que los servicios de Telegram se prestan con la condición de aceptar que no se garanticen los derechos de terceros en el intercambio de datos personales entre los usuarios, lo que implica una cesión de derechos fundamentales a cambio de esa supuesta privacidad.