El PP considera que sigue contando con el apoyo de Vox para una investidura de Alberto Núñez Feijóo a pesar de que Santiago Abascal lo ha dejado en el aire y ha pedido explicaciones de por qué los populares les han dejado fuera de la Mesa del Congreso pese a ser la tercera fuerza política.
El PP no ha tenido este jueves el apoyo de Vox a la candidatura de Cuca Gamarra a la Presidencia del Congreso, un puesto que ha recaído en la socialista Francina Armengol tras llegar los socialistas a un pacto con JxCat. Los diputados de Abascal han votado a su propio candidato, Ignacio Gil Lázaro.
Vox ha explicado que su postura ha respondido a la decisión del PP de no ayudarles a tener un puesto en la Mesa del Congreso, donde los populares se han hecho con las vicepresidencias segunda y cuarta y las secretarías tercera y cuarta, cuatro puestos en total.
Fuentes del PP consultadas por EFE restan importancia a este movimiento de Vox, que se ha producido una vez que ya era conocido el pacto entre Junts y el PSOE y por tanto cuando la candidatura de Gamarra ya no tenía posibilidades de prosperar.
Desde el PP consideran además que Vox no ha retirado su apoyo a la investidura y que se mantiene en la posición adoptada el pasado 6 de agosto, cuando en un comunicado anunció que apoyaría una alternativa a un gobierno de Pedro Sánchez, que califican de «destrucción nacional».
Sin embargo, el presidente de Vox ha defendido ante los medios que su apoyo era a una alternativa «que mantenga el respeto a la nación y la recuperación de la neutralidad de las instituciones», tal y como figuraba en el comunicado que difundieron entonces y que el partido ha vuelto a enviar este jueves con dicha frase subrayada.
Según Vox, no hay neutralidad en las instituciones dejando fuera de la Mesa del Congreso a la tercera fuerza política del país, que tiene 33 diputados. Sin embargo, y pese a la insistencia de los medios, Abascal no ha aclarado si su partido retira su apoyo a Feijóo, lo que ha dejado en el aire.
Vox dice estar «perplejo» y pretende volver a hablar con el PP «para entender» si realmente están dispuestos a impedir un Gobierno «de destrucción nacional».
La izquierda ha puesto de relieve la división entre el PP y Vox, en la que el PSOE ve la prueba de que Feijóo no cuenta con entre 171 y 172 apoyos para su investidura, como ayer expresó en el Congreso, sino que está solo, pues los únicos apoyos de UPN y Coalición Canaria imposibilitarían definitivamente su gobierno.