La psicóloga Lara Ferreiro coincide con el arzobispo Luis Argüello en que estamos desdibujando el verdadero significado de la comunión. “Estamos criando niños que viven solo para abrir regalos”, asegura esta experta, que confiesa que una paciente llegó a reconocerle que su mayor ilusión era “hacer la comunión para vestirse de novia”. Ferreiro no tiene dudas de que esto es solo la punta del iceberg de una crisis más profunda: “Las redes sociales fomentan la ansiedad y el insomnio, y nos convierten en personas que confunden la felicidad con tener que demostrarla a los demás”.
