El gobierno de Pedro Sánchez ha dado un golpe estratégico en el sector empresarial con la intervención de Telefónica. Gabriel Serrano nos cuenta cómo Moncloa ha movido ficha para tomar el control de la teleco, ordenando a la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI) adquirir un 10% de la compañía, lo que equivale a una inversión de 2.285 millones de euros. Este movimiento busca contrarrestar la entrada de Arabia Saudí en el capital de Telefónica.
El viernes pasado, se convocó una reunión clave en el Palacio de la Moncloa, encabezada por Manuel de la Rocha, secretario de Estado de Asuntos Económicos, en la que se discutió la estrategia de cambios en la cúpula de la empresa. En ese encuentro, se acordó la sustitución de José María Álvarez-Pallete, quien tras 9 años al frente de Telefónica y 25 años en la operadora, aceptó la solicitud del gobierno para dejar su cargo.
Su reemplazo será Marc Thomas Murtra Millar, un hombre cercano al gobierno y especialmente al Partido Socialista Catalán, que ha sido apoyado por la SEPI desde su mandato en Indra. Este movimiento forma parte de un plan que el gobierno lleva tiempo ejecutando para reforzar su influencia en empresas clave del país.
