Edmundo González llega exiliado a España tras ser el vencedor en las elecciones. Tras temer por su vida y la de su familia y haber estado refugiado en la embajada de Holanda, decide salir de Venezuela rumbo a España para refugiarse.
España le da asilo, pero no lo reconoce como presidente electo todavía, Zapatero fue clave en estas negociaciones, aunque el gobierno de España lo niega.