Hoy en Dando Caña, les contamos como Gustavo Petro termina por agachar la cabeza y ceder ante Donal Trumpo con el tema de las deportaciones.
En un giro inesperado, Colombia ha cedido a las exigencias de la administración Trump tras una breve pero intensa guerra comercial. Todo comenzó cuando el presidente estadounidense denunció que un vuelo con inmigrantes colombianos deportados no fue recibido en Colombia, lo que desató sanciones arancelarias y financieras contra el país latinoamericano.
El presidente Gustavo Petro inicialmente rechazó las medidas, calificando el trato hacia los colombianos como injusto. Sin embargo, bajo presión de aranceles de hasta el 50% y otras sanciones, Colombia aceptó recibir a todos los deportados sin restricciones. Este acuerdo mantiene amenazas latentes de más represalias si se incumplen las condiciones pactadas.
