Vox realizó una visita a la central nuclear de Ascó, en Tarragona, para denunciar el plan del Gobierno de Pedro Sánchez, que prevé el cierre progresivo de las centrales nucleares en España entre 2027 y 2035.
Según el Gobierno, la energía nuclear no es sostenible ni segura, y apuesta por un modelo basado en energías renovables. No obstante, Vox critica duramente esta política, señalando que las nucleares son esenciales para la soberanía energética del país.
La central de Ascó, que cuenta con dos reactores, abastece al 60% de la electricidad de Cataluña y al 9% del consumo nacional. Vox subraya que el cierre de las nucleares generaría desabastecimiento energético, pérdida de empleos y dependencia de terceros países.
Además, argumenta que otras naciones como Francia logran facturas eléctricas más económicas gracias a la energía nuclear.
Vox propone un «Plan Nacional de Soberanía Energética» que combine energías nucleares, renovables y recursos hidráulicos para garantizar un suministro energético sostenible y competitivo.
La formación acusa al Gobierno de impulsar políticas climáticas que perjudican a la industria española, encarecen la electricidad y generan dependencia energética, y afirma que estas medidas son fruto de intereses extranjeros y del «fanatismo climático» de Sánchez.
