Sánchez no solo critica a sus presidentes autonómicos y los llama petardos e impresentables. También hace juicios no muy buenos sobre su ministra de Defensa, Margarita Robles. Sánchez la llama pájara y hace bromas sobre ella con Ábalos asegurando que se acuesta con el uniforme. Robles resta importancia a los mensajes. Dice que son de hace años y que no quiere comentar conversaciones privadas. Para la oposición, restar importancia a estos mensajes muestra la poca dignidad de la ministra.
