A pesar del restablecimiento de la práctica totalidad del suministro eléctrico en España, varias secuelas del apagón siguen presentes en muchos lugares del país. Una de ellas es el caos con los trenes, con la estación de Puerta de Atocha como uno de sus máximos exponentes. Muchos pasajeros continúan a la espera de que los trabajadores les indiquen cuándo y cómo subir a los trenes, algunos cancelados, y otros atrasados.
Una trabajadora de Renfe, presente en Atocha, explica la complejidad para dar una solución a todas las personas perjudicadas: «Está siendo difícil. Estamos reubicando a todas las personas que tenían billete ayer, para que puedan viajar hoy. Pero está siendo una situación muy difícil para todos».
¿Está funcionando el servicio de larga distancia en Madrid?
Varios trenes de larga distancia que se dirigen a Valencia, Barcelona, Málaga o Sevilla han podido partir durante las primeras horas de la mañana. Pero esto no ha evitado que se produzcan aglomeraciones de pasajeros frustrados, especialmente en las plantas bajas de la estación, frente a los controles de seguridad.
Según indican fuentes policiales, actualmente sigue registrándose una gran cantidad de retrasos. A pesar de ello hay cierto optimismo: «Pero trabajadores de aquí manifiestan que hasta hace unas horas es como un día normal, pese a que muchos trenes muestran retraso».
El principal problema es para aquellos viajeros cuyo trayecto estaba planeado para el lunes, día que tuvo lugar el infame apagón. Estos no tuvieron más remedio que adquirir otro billete para lo antes posible, o bien quedarse en Madrid. «Es mi cumpleaños, a ver si puedo soplar las velas en Sevilla. Están llamando a gente de los trenes de ayer y de hoy pero Renfe no ha explicado nada, quiero saber qué tengo que hacer», explicó una joven que iba a viajar a Sevilla el lunes.
Un colapso difícil de evitar
A pesar de que el flujo de trenes no está parado, esta mañana se ha producido un colapso en Atocha debido a la aglomeración de pasajeros cuyos billetes indicaban un viaje esta mañana, pero también por la afluencia de los que se quedaron en tierra el lunes. Mientras, los trabajadores de Renfe intentaban mantener la normalidad y evitar el colapso hacia los andenes. «Billetes a Barcelona de ayer y de hoy hasta máximo las 11.00 horas, vamos pasando», indicaba un trabajador por megáfono.
El perjuicio para muchos viajeros implica no solo el abono de un nuevo billete, sino el pago por pasar una noche extra, no contemplada, en Madrid. Otro viajero que quiere regresar a Tarragona explica que «están reubicando a toda esta gente de ayer, más la gente con billetes en horarios habituales. Hay el colapso de ayer y de hoy».
Y volviendo a quienes viajan hoy, algunos pasajeros simplemente han tenido que esperar a que se les llame para subir al tren, algo más tarde de lo previsto. Algunas personas siguen sin datos móviles ni cobertura, a pesar del regreso de la electricidad e internet, y estas se suman a la larga lista de perjudicados.