Las averías e incidencias en los trenes de Cercanías de Madrid se han vuelto una rutina preocupante. Trenes parados durante horas, trayectos cortados e incluso usuarios caminando por las vías son escenas que se repiten con frecuencia, calificadas por el alcalde de la capital, José Luis Martínez-Almeida, como «tercermundistas».
Este escenario no es sorpresa, ya que el presidente Pedro Sánchez ha relegado las inversiones en redes ferroviarias en Madrid, otorgando hasta tres veces menos fondos en comparación con Cataluña.
Según datos del Ministerio de Transportes, desde la llegada de Sánchez al poder en 2018, el Gobierno ha destinado más de 1.200 millones de euros a los Cercanías de Cataluña, casi triplicando la inversión en Madrid, que apenas ha recibido poco más de 430 millones de euros. Esta disparidad también se observa en otras comunidades autónomas, evidenciando la estrategia de inversión del Gobierno: destinar 173 millones más a Rodalies que a todos los cercanías del resto de España.
Desde el Partido Popular se ha recordado que el expresidente Mariano Rajoy tenía un paquete de «medidas urgentes» para Cercanías Madrid valorado en 5.000 millones de euros, el cual quedó en el olvido tras la moción de censura que llevó a Sánchez a la Presidencia del Gobierno.