Óscar Puente, ministro de Transportes y Movilidad Sostenible, aseguraba en una reciente entrevista a RNE que la culpa de la fuga de Carles Puigdemont no es del Ejecutivo. «No se le puede imputar ninguna al Gobierno de España», aseguraba, a la vez que señalaba a la Generalitat. «Quien sí tenía acceso a Puigdemont, y de hecho, estuvo rodeado de mossos durante buena parte de su acto en Barcelona, era la Generalitat y, por tanto, ahí recaen las responsabilidades», añadía.
Y es que Puente ha incidido en que la responsabilidad del mecanismo de seguridad, habilitado para la «performance» de Puigdemont y para evitar su fuga, es del Gobierno catalán, el cual estaba gobernado por el socio de investidura del PSOE, ERC. Y con respecto a las acusaciones al Gobierno de España sobre el control de fronteras, Puente ha señalado que al integrarse el país en el espacio Schengen, así como Francia, entonces los desplazamientos entre ambas naciones son libres.
Puente anima a Junts a cambiar de estrategia
Óscar Puente tiene claro que la estrategia de Puigdemont y de Junts no es positiva para ellos. «Sinceramente, esto al final no es más que ruido. No creo que beneficie al propio protagonista ni a Junts. Yo creo que Junts es un partido que necesita redefinir su estrategia, no puede ser que en Cataluña el partido, digamos, que más ha pesado en la historia de la comunidad autónoma esté ahora al margen de los procesos de toma de decisiones, que no vaya a pesar prácticamente en el futuro inmediato de Cataluña, esté fuera del gobierno y que sigan en esta estrategia», reflexionaba.
Acto seguido, el ministro se mostraba convencido de que la formación cambiará de estrategia. Para él, el único camino posible es volver a ser un partido «práctico, que toma decisiones que tienen trascendencia en la vida diaria de los catalanes».
Y cuando se le preguntó sobre si cree que Junts mantendrá su apoyo al Gobierno de Pedro Sánchez, Puente dijo que seguirán respaldando ciertas iniciativas, mientras que otras no, «porque no coinciden con sus planteamientos políticos». Aun así, este vaticina: «Creo que la situación no va a cambiar gran cosa», en comparación con lo vivido desde el 23-J.