El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha aterrizado este martes en Arabia Saudí. Se trata del primer destino del republicano, como parte de una gira de cuatro días en Oriente Medio en la que realizará también paradas en Qatar y Emiratos Árabes Unidos (EAU). El objetivo es firmar acuerdos económicos con estos países.
Al llegar a la capital del reino musulmán, Riad, Trump fue recibido directamente por el ministro de Defensa y líder ‘de facto’ del país, el príncipe heredero, Mohamed bin Salmán. El mismo acompañaba a Trump por una alfombra morada tendida en medio de una guardia de honor, hasta llegar a la Terminal Real del Aeropuerto Internacional Rey Jalid, para un primer cara a cara.
La delegación del Gobierno de Estados Unidos está formada por el propio presidente, por el secretario de Estado Marco Rubio, su homólogo en Defensa Pete Hegseth, el del Tesoro Scott Bessent, el de Comercio Howard Lutnick, y finalmente el de Energía Chris Wright.
Una prioridad para la Administración Trump
Se trata del segundo viaje al extranjero que realiza el presidente republicano, desde que asumió por segunda vez el cargo, el pasado mes de enero. La primera, muy reciente, consistió en un viaje a Roma, cuando Trump acudió al funeral del Papa Francisco.
El segundo destino previsto para esta gira es Qatar. Además, cabe añadir la polémica que ha causado el avión de lujo Boeing 747-800, aceptado por Donald Trump y que se convertirá en aeronave de su Presidencia. Esto le ha generado críticas, incluso por parte de algunos aliados del republicano.