2 de marzo de 1944. Y desde entonces tenemos en España el DNI
Tal día como hoy, 2 marzo de 1944, se implantaba en España el Documento Nacional de Identidad, el DNI, bajo el gobierno de Franco y siendo ministro de Gobernación, es decir, de Interior, el catedrático y jurista canario Blas Pérez González.
El DNI nacía como necesidad administrativa para controlar la identidad de los ciudadanos, como se estaba haciendo ya en todos los países desarrollados, pero en España se partía de un notable caos administrativo. En nuestro país no hubo documentos individuales de identidad hasta el siglo XIX, cuando el rey Fernando VII atribuyó a la policía la misión de expedir padrones y las correspondientes cédulas de identidad. Estas cédulas incluían el nombre y los apellidos del ciudadano y de sus padres, pero nada más; por otro lado, sólo se habilitaban cuando alguien tenía que hacer alguna gestión ante organismos oficiales. Es decir que uno podía perfectamente pasarse toda su vida sin documento de identidad alguno.
Por sorprendente que parezca, el mismo sistema se prolongó durante el primer tercio del siglo XX, de manera que hasta la guerra civil había bastantes pocos españoles con identidad acreditada. Concluida la guerra, el régimen de Franco acometió aquel retraso administrativo; lo cual, por otro lado, le vino muy bien para controlar a los españoles. Así nació el DNI, que en un primer momento incluía no sólo los datos de filiación, sino también una casilla para fijar el estatus económico.
El número 1 fue asignado al Jefe del Estado, Francisco Franco. Los números 10 al 99 fueron asignados a la Familia Real. Al príncipe don Juan Carlos, después rey, se le asignó el número 10. El número 13 no tiene titular. Después, ya en época democrática, al número de DNI se agregó la letra del NIF, de manera que al control administrativo se añadía el control fiscal. La primera ciudad cuyos vecinos tuvieron DNI fue Zaragoza. Luego, Valencia. Hoy ya estamos todos completamente controlados.
Otros hechos:
1724: Muere en Plasencia el arquitecto Joaquín de Churriguera, hijo y hermano de arquitectos barrocos, maestro mayor de la Catedral Nueva de Salamanca.
1783: Muere en Murcia el escultor Francisco Salzillo, el más insigne imaginero del barroco. El Museo Salzillo de su ciudad natal guarda memoria de su obra.
1912: El gobierno liberal de Canalejas decreta obligatoria la lectura de Don Quijote en las escuelas públicas.
1933: Se presenta el programa de Renovación Española, primer partido monárquico constituido durante la II República, bajo la dirección de Goicoechea y Calvo Sotelo.
1967: Muere en Madrid a los 93 años el escritor José Martínez Ruiz, “Azorín”, una de los grandes nombres de la Generación del 98, académico de la Española desde 1924.
1974: Es ejecutado en garrote vil el anarquista Salvador Puig Antich, condenado a muerte por el asesinato de un policía.